¿Dónde están los demás?

MiguelDevocionalesLeave a Comment

Entre las familias de Rubén hubo grandes propósitos del corazón. Galaad se quedó al otro lado del Jordán; y Dan, ¿por qué se estuvo junto a las naves? Se mantuvo Aser a la ribera del mar, y se quedó en sus puertosJueces 5:16-17

Tal y como lo había prometido, Dios le dio a Barac y su ejército una gran victoria contra Sísara y su ejército de carros herrados, sin embargo, en el cántico que Débora y Barac entonan posterior a la batalla nos hace ver la actitud de algunas tribus en no querer asistir a la batalla.

¿Dónde están los demás?

Entre las familias de Rubén había la intención, pero no pasó de allí. Tenían grandes propósitos de corazón, pero nunca fueron a la batalla. Así también en la obra del Señor hay quienes tienen las intenciones, pero nunca las llevan a cabo. Con palabras prometen, pero no actúan. El Señor Jesús habló sobre aquel hijo a quien su padre le envió a trabajar en su viña y éste contestó: “Sí, señor, voy. Y no fue” (Mateo 21:30). Las intenciones son buenas, pero en sí mismas no llevan a ningún lado ni dan fruto para Dios.

Los de Galaad se quedaron al otro lado del Jordán. Para ellos la ubicación representaba un problema, era lejos e inconveniente llegar al lugar de batalla. No estaban dispuestos a hacer el esfuerzo para ayudar a los hijos de Israel. Para el Señor Jesucristo la distancia no fue un problema, Él vino del cielo hasta el mundo a llevar a cabo la obra de nuestra salvación.

Los de Dan y Aser no acudieron debido a su ocupación. Dan junto a las naves y Aser en sus puertos estaban muy ocupados como para dirigirse a la batalla y librar a Israel. Así también, en la obra del Señor, hay muchos que están tan ocupados que no tienen tiempo para el servicio.

Gracia al Dios por los que son como Zabulón y Neftalí quienes “expusieron su vida hasta la muerte” para librar a Israel de sus enemigos. Ese fue el ejemplo que nos dejó el Señor Jesucristo.

Yo quiero ser obrero de valor,
confiando en el poder del Salvador.
El que quiera trabajar hallará también lugar
en la viña del Señor.

Miguel Mosquera

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