Y cuando Herodes le iba a sacar, aquella misma noche estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas” (Hechos 12:6)
Cuando la voluntad de Dios no tiene sentido
“¡Oh Señor Jehová! ¿y tú me has dicho: Cómprate la heredad por dinero, y pon testigos; aunque la ciudad sea entregada en manos de los caldeos?” (Jeremías 32:25)
De buena gana
Sea que Dios nos quite la carga o nos dé la gracia para llevarla, que aceptemos su voluntad con una buena actitud, de buena gana, con el mayor placer.
Pasando por diversas adversidades
Viento, turbión, sequía o intenso calor pueden llegar a nuestra vida para hacer daño.
El ojo del huracán
Las tempestades son necesarias, porque solamente en el medio de la tempestad podemos experimentar la paz que reina en el ojo del huracán