Las predicaciones del evangelio en el libro de los Hechos tienen muchas enseñanzas para nosotros de cómo debemos exponer el mensaje de salvación a quienes no tienen a Cristo. El mensaje de Pedro fue claro y entendible; fue respetuoso, pero solemne y veraz.

Fue un mensaje basado en las Escrituras. En su predicación Pedro citó al profeta Joel y también dos salmos, y con ellos desarrolló su mensaje. ¡Cuán importante es que podamos dirigir a nuestra audiencia a la Palabra de Dios! Ella es poderosa y eficaz en señalar la verdad al pecador. “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma” (Salmo 19:7).

Fue un mensaje centrado en la Persona de Cristo; su aprobación de parte de Dios, así como sus milagros entre el pueblo. Señaló la obra de la cruz en cumplimiento de las Escrituras y también su resurrección con poder y gloria. No estaba señalando un grupo religioso, sino una relación con una Persona.

Pedro fue directo en la necesidad del pecador de arrepentirse de sus pecados y recibir a Cristo como Salvador.

Este es el mensaje del evangelio. ¿Lo has recibido?

Si estás convencido, por el evangelio,
que Cristo en la cruz tus pecados llevó;
pues en el Calvario por ti dio su vida,
mas al tercer día Él resucitó.
¿Por qué te demoras corriendo el riesgo
de perder tu alma por la eternidad?
Sé salvo ahora, en Cristo creyendo,
¡no dejes pasar esta oportunidad!

Miguel Mosquera