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¿Qué es la muerte?

¿Qué es la muerte?

Hay mucha especulación en cuanto a este tema. Unos opinan una cosa y otros otra cosa. Sin embargo, estoy convencido que la Palabra de Dios, la Biblia, tiene la respuesta final y verdadera en cuanto a la muerte.

Cuando pensamos en la muerte lo primero que nos viene a la mente es la muerte física, donde el cuerpo queda sin vida, inerte, y esta es nuestra manera de ver e interpretar la muerte. Pero esta no es la manera como Dios nos introduce este tema. La primera mención en la Biblia a la muerte la encontramos en Génesis 2:17, donde dice: “mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás”. En el capítulo 3, cuando Adán y Eva pecaron, ¿cayeron sus cuerpos muertos y sin vida en el huerto de Edén? De ninguna manera. ¿Qué quiso entonces decir Dios con ‘el día que de él comieres, ciertamente morirás? Ya lo veremos con más detalle en un momento.

Al leer las muchas referencias en la Biblia sobre la muerte nos daremos cuenta de que las Escrituras usan el término muerte al menos de tres maneras y en todas ellas lleva la idea de ‘separación’. Veamos con más detalle:

  • Muerte espiritual: la primera mención en la Biblia a la muerte no tiene que ver con la muerte física. Dios dijo a Adán y Eva que “el día que de él comieres, ciertamente morirás”. La muerte física vino como consecuencia del pecado (Romanos 5:12), pero Adán murió físicamente 930 años después (Génesis 5:5), sin embargo, Dios había dicho – “el día que de él comieres”. La consecuencia de la desobediencia sería inmediata. Ellos no murieron físicamente ese mismo día, pero ese mismo día fueron echados de la presencia de Dios; murieron espiritualmente. La comunión con Dios había quedado rota y es que el pecado causa separación entre una persona y Dios. Dios es luz y no hay tinieblas en Él, Dios no tiene comunión con el pecado. Dice el profeta Isaías – “vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios” (Isaías 59:2). Todos somos pecadores y, a menos que Dios nos dé la vida en Cristo, todos están muertos espiritualmente, esto es, separados de Dios por causa del pecado. Por eso dice también en Efesios 2:1 «Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados».
  • Muerte física: la muerte física también es consecuencia del pecado. «Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron» (Romanos 5:12). La muerte física es la separación del alma y el espíritu del cuerpo. Así nos lo explica la Biblia cuando murió Raquel: «Y aconteció que al salírsele el alma (pues murió)» (Génesis 35:18). El cuerpo es colocado en el sepulcro, pero el alma de la persona pasa a la eternidad, al lugar que haya escogido aquí en la tierra: el cielo o el infierno (Lucas 16:19-31). Algunos piensan que cuando la persona muere, el alma queda inconsciente o ‘muerta’ hasta el día de la resurrección. Esto es contrario a las palabras del Señor Jesucristo cuando dijo – “no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno” (Mateo 10:28).
  • Muerte eterna: Está destinada a todo aquel que rechaza el regalo de la salvación que Dios ofrece en el Señor Jesucristo. La Biblia también la llama «la muerte segunda». Es la separación eterna de Dios; es el infierno. «Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda» (Apocalipsis 21:8). Dice también: «Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles» (Mateo 25:41). Fíjese que el lago de fuego es llamado ‘la muerte segunda’, y significa eterna separación de Dios, porque Dios dice: ‘apartaos de mí’.

Todos nacemos muertos espiritualmente, pero Jesucristo puede dar vida al que confía en Él, como dice «Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo(por gracia sois salvos)» (Efesios 2:4-5). Cristo dijo «yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia» (Juan 10:10). Pero el que rechaza la verdadera vida en Cristo y muere físicamente entonces le espera la muerte eterna, para siempre separado de Dios.

“El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él” (Juan 3:36).

Miguel Mosquera

Si quieres saber algo más o tienes algún comentario sobre esta u otra pregunta puedes contactarnos a info@salvoxgracia.com

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